Absceso anal

¿Qué es un absceso anal?

Es un proceso infeccioso con acumulación de pus en los espacios circundantes al ano y el recto. Una de las causas de dolor anal agudo.

Causas

La causa más frecuente es la obstrucción de las glándulas anales. Los pacientes con Enfermedad de Crohn pueden verse afectados con abscesos que no guardan relación con las glándulas anales y habitualmente presentan abscesos de mayor complejidad.

Síntomas

El síntoma más común es el dolor, que posteriormente se puede acompañar de abultamiento en la piel, enrojecimiento y aumento de la temperatura de la piel en el sitio afectado. En casos más avanzados se puede llegar a presentar fiebre, dificultades para evacuar y orinar.

Los pacientes presentarán los síntomas de acuerdo a la localización del absceso. Algunos pacientes presentan dolor anal sin otros hallazgos externos visibles (p ej. absceso interesfintérico o interno). Las personas con absceso más profundos presentarán fiebre y dolor pélvico, de forma inicial, haciendo un diagnóstico más difícil.

Diagnóstico

La enfermedad se diagnostica de forma habitual con un examen físico. En casos especiales se requiere de empleo de estudios de imagen como ultrasonidos endoanales, resonancia magnética o tomografías computarizadas.

Tratamiento

El tratamiento de un absceso SIEMPRE debe de ser el drenaje quirúrgico, ya que el retraso en su tratamiento causa mayor destrucción y daño de los tejidos adyacentes.

Los pacientes con enfermedades crónicas como diabetes, enfermedad renal, cardíaca o pulmonar, se encuentran en mayor riesgo del desarrollo de complicaciones.

Algunos de los abscesos pueden ser drenados en el consultorio o sala de emergencias bajo anestesia local, dependiendo de la localización, tamaño y características del paciente. Una vez drenado, los pacientes se mantendrán con aseos de la herida, hasta que esta logre cicatrizar.

Complicaciones

Destrucción de los tejidos circundantes al ano, los esfínteres anales, infección severa de los tejidos blandos de toda el área anogenital, formación de fístulas anales.

Evolución posterior al drenaje

Aproximadamente un 45% de los pacientes, desarrollarán un fase crónica de la enfermedad en forma de una fístula anal.

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